poema para la piel manchada (mi parte)

la carne, pasada de cuerpos
siente sola

más si los ríos
acaban en su lecho

y beben magia de las pieles
turbio líquido entrando
en las vísceras

pesado plomo, el amor

sacudida al deseo
quebrado
acenchando el bosque

veneno los recuerdos
cadáver saliendo de las grietas
formando el alma

la tuya

muerte en tus manos
ahorcando mis sábanas

entre muchas
tu piel